2.6: LA VARIABLE VISUAL COLOR

El color es la más poderosa y la más frecuentemente utilizada de las variables visuales para el diseño de símbolos gráficos. Por esta razón y porque es una variable con características muy complejas, se debe de estudiar aparte dedicándole un capítulo entero a ella.

El color puede ser descrito de acuerdo a sus tres coordenadas: Tono, Valor y Saturación.

- El tono es la longitud de onda que define a un color, o dicho con una terminología más casera, es el nombre del color por ejemplo: rojo, naranja, verde, azul, amarillo, violeta, fucsia, salmón, ...

- El valor es la cantidad de luz reflejada por el color. Esta medida de la reflectancia puede ser comparado con los valores de una escala de grises.

- La saturación es la pureza o la intensidad de un color. Partiendo desde un tono puro, la saturación del color se modifica añadiéndole gris neutro hasta terminar en éste.

EL tono aplicado a símbolos puntuales: Tiene esta variable la ventaja de que la percepción humana es muy sensible a sus cambios y por tanto se pueden utilizar muchas variaciones. Tiene sin embargo la desventaja de que su aplicación es la más costosa.

Aplicada a símbolos puntuales no requiere que éstos tengan un gran tamaño. Si hay que diferenciar claramente unos colores de otros los símbolos puntuales deben tener al menos 1,5 mm de diámetro. Al disminuir el diámetro limitamos el uso de colores diferentes. El ojo humano puede identificar miles de tonos diferentes pero conforme disminuye la superficie coloreada se hace más difícil la discriminación.

 

El tono aplicado a símbolos lineales: La continuidad de las líneas permite utilizar con la variable tono un tamaño más pequeño en su grosor que el utilizado en los diámetros de los puntos.

 

Cuando las líneas sean muy finas se debe tener cuidado de que no estén rodeadas de colores que modifiquen su tono aparente.

 

El tono aplicado a símbolos superficiales: Dice Cynthia Brewer que "...cuando el color se utiliza de forma apropiada en un mapa, la organización de las dimensiones perceptuales del color se corresponden con la organización lógica de los datos que definen el mapa". Dicho en otras palabras, las características cualitativas, cuantitativas y ordenadas que definen los datos de un mapa, deben ponerse de manifiesto mediante la utilización de esas mismas características en los colores que definan los fenómenos. Hasta hace poco, las únicas recomendaciones que a modo de receta hacían los textos de cartografía, era que el tono debía aplicarse cuando los datos representados fueran cualitativos y se debería utilizar el valor, cuando hubiera que mostrar diferencias de orden o cantidad. El color aplicado en las simbologías superficiales permite identificar de un golpe de vista no sólo qué ocurre en tal provincia sino cuáles son las provincias en las que ocurre tal característica.